martes, 8 de diciembre de 2009

Un estudio científico aboga por aumentar la población de cernícalo para combatir la plaga


EFE  Ciudad Real.- Un estudio científico aboga por aumentar la población de cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) como medida para combatir las explosiones demográficas del topillo campesino (Microtus arvalis) en la Meseta Norte.

Ésta es una de las conclusiones de los estudios realizados por investigadores de Museo Nacional de Ciencias Naturales, el Instituto de investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) y el Museu de Zoología de Barcelona.

Estos investigadores se han encargado durante los últimos once años de analizar la relación de dependencia de un depredador generalista como el cernícalo vulgar con algunas de sus especies presa.

Según explicaron hoy a Efe sus autores, los profesores Juan Antonio Fargallo, Jesús Martínez-Padilla, Javier Viñuela, Guillermo Blanco, Ignasi Torre, Pablo Vergara y Lisbeth de Neve, el estudio se ha centrado en la relación del cernícalo vulgar con especies presas como el lagarto ocelado (Lacerta lepida), la musaraña gris (Crocidura russula) y el topillo campesino.

El cernícalo vulgar podría ser, a priori, una especie ideal para iniciar investigaciones que permitan definir sus efectos a la hora de combatir las explosiones demográficas del topillo, puesto que se alimenta de ellos, ocupa fácilmente las cajas-nido fabricadas por el hombre, y parece tener capacidad para regular su densidad de población.

A juicio de los investigadores, podría resultar relativamente sencillo crear o aumentar poblaciones de esta especie, siempre que exista en el medio el alimento suficiente para sustentarlas.

Esta teoría, han explicado, se ha obtenido después de estudios que se han realizado en la comarca ganadera de Campo Azálvaro, en los términos municipales de El Espinar, Navas de San Antonio (Segovia) y Navalperal de Pinares (Ávila).

En esta región se ha llevado a cabo un seguimiento de la población de cernícalos vulgares desde 1993 y mediante trampeos se ha estimado la abundancia de topillo campesino, musaraña gris y lagarto ocelado desde 1997.

Los resultados muestran que tan sólo la población de topillo campesino es capaz de determinar la abundancia de cernícalos entre años.

Las otras dos especies, la musaraña gris y el lagarto ocelado, no explican de forma importante la dinámica poblacional de este depredador.

En el caso del topillo, su dinámica está explicada por la abundancia de cernícalos y por variables climatológicas, "hay más topillos cuando menos cernícalos hubo el año anterior, cuando la temperatura media anual fue más alta y cuando la precipitación anual fue también mayor", aseguran los investigadores en su estudio.

En el caso de las musarañas, su población se incrementó con un descenso de la abundancia de cernícalos y un aumento de la temperatura y en el caso de los lagartos, tan sólo afectó la precipitación durante el verano del año anterior, incrementándose su población con una mayor precipitación durante el mes de agosto.

El interés particular de estos resultados está relacionado con la conservación y la economía a escala regional, de tal forma que, según la teoría, el efecto esperado de un depredador generalista es el de estabilizar o atenuar las explosiones demográficas de sus presas, lo que parece cumplirse en este estudio.

Los picos demográficos de los topillos encontrados en la región de estudio son de menor tamaño que los encontrados en regiones más nórdicas o en áreas vecinas de Castilla y León donde la abundancia de cernícalos es más baja.

Por lo tanto, y dado lo acontecido en 2007 en la Meseta Norte en relación con el topillo, sería conveniente investigar si los depredadores podrían utilizarse como herramienta para prevenir las explosiones demográficas de este roedor, que aparentemente causa daños significativos en la agricultura, dicen los investigadores.

Por otra parte, se podría además reducir el uso de veneno como plaguicida, que causa la muerte indiscriminada de otras especies, perjudicando el estado de conservación de las poblaciones de fauna silvestre y perjudicando también a otras actividades económicas como es la caza.

Fotografía proporcionada por el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) de un topillo campesino, roedor cuyas explosiones demográficas, según un estudio reciente, podrían disminuir si se aumenta en las zonas donde actúa la población de cernícalos comunes.